Texcoco, Méx.- Jorge Rojas Miguel, relata que en su familia de generación en generación se ha transmitido el conocimiento para el manejo y tallado de la madera para hacer distintas figuras. “Nosotros moldeamos la madera, le damos el terminado de acuerdo al capricho de la naturaleza o como el cliente pida la figura”, esta es la tradición que tiene nuestro taller artesanal que data de hace 100 años.
Dijo que la práctica en su taller ha logrado que en 40 años se haya especializado en destreza, habilidad y visión para formar cualquier figura en madera.
Jorge Rojas explicó que junto con ocho familiares se han dedicado al oficio artesanal desde hace muchos años, en el taller ubicado en la comunidad de San Miguel Tocuila.
Agregó que cuando era pequeño, su padre le enseño el oficio de tallar un trozo de madera que él lo convirtió en una obra de arte.
Además de sus creaciones en madera, se da el tiempo para realizar lienzos y una gran diversidad de esculturas en diversos tipos de madera, comentó.
Aseguró el artesano que las maderas con las que elabora sus obras de arte son “vacunadas” para impedir la penetración al interior de plagas de termitas y perduren intactas hasta por 150 años.
Durante una entrevista Jorge Rojas mostró sus dotes de artista, pues ha realizado algunas pinturas al óleo y la obra religiosa que representa su orgullo es la que denominó “el artesanito”. Donde se representa a un niño artesano de vestimenta humilde que pinta los últimos toques a la imagen de la Virgen María que abre sus manos en señal de protección.
Mencionó que en sus trabajos artesanales predomina el tema religioso, pero también ha elaborado representaciones diversas en madera de tamaños diversos.
En el pequeño taller observamos que destacan las obras talladas en madera de gran tamaño; esculturas que representan a un Arcángel, un crucifijo enorme y un Cristo redentor de más de cuatro metros de altura.
Además, Jorge Rojas mostró que en este modesto taller almacena un sin fin de esculturas donde la técnica que prevale es el tallado de la madera, pero también utiliza el yeso para la restauración de figuras a imagen del “Niño Dios” que llevan a reparar familias para conservar las tradiciones del día 2 de febrero “Día de la Candelaria”.
Asimismo, explicó que pintan lienzos, murales o elaboran piezas en madera de acuerdo a la forma caprichosa que les dio la naturaleza a ese trozo de material, ejemplificó que han decorado las iglesias de Tezoyuca y Chiconcuac.
Refirió que la madera cuando se talla tiende a abrirse debido a que esta “tierna”, pero también por los cambios bruscos del tiempo, por lo cual debe aplicarse una tela del bagazo de la caña que forma una piel que se ajusta a la escultura para protegerla de los cambios de temperatura, lo cual garantiza que esta perdure por más de 100 años en condiciones aceptables.
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